En la actualidad se tienen varias herramientas para conseguir la construcción exitosa de alguna edificación. Para el caso del Proyecto de la Torre BFK 230, se eligió trabajar mediante la metodología BIM pues representó un método eficaz para coordinación entre las especialidades durante la fase de diseño y el proceso de construcción, ayudando a tomar mejores decisiones y proporcionando un instrumento valioso para los especialistas en estructura, minimizando los errores y mejorando la logística de construcción debido al espacio reducido del espacio.
Esta metodología también pretende ser un instrumento eficiente en una siguiente fase de este edificio, reduciendo los gastos de operación y facilitando el mantenimiento del inmueble, formando parte fundamental de los beneficios a los dueños o inversionistas.